El trastorno obsesivo compulsivo es una manifestación que implica que la persona experimente algún tipo de obsesión o compulsión, se caracteriza por un patrón de ideas imperiosas, reiteradas que no se pueden vencer y se deben repetir una y otra vez. En su vertiente de conducta se originan los rituales obsesivos, la preocupación por el orden, el perfeccionismo, el control mental e interpersonal.
En este caso la obsesión es un pensamiento o imagen que se torna de manera intensa en la mente de un individuo reflejándose en un constante lavado de manos por miedo a la suciedad, miedo a los gérmenes, miedo a las toxinas.
Donde también se origina la constante verificación de objetos por ejemplo: Que se haya cerrado la llave del gas, la puerta de la casa, también se origina un impulso de carter agresivo o sexual , miedo a hacerle daño a alguien y la irremediable necesidad de tener las cosas en un orden determinado siguiendo una pauta, color o forma y la compulsión es cuando actuamos o pensamos de forma repetitiva estereotipada como respuesta al deseo de prevenir o reducir el malestar o la ansiedad que nos produce las obsesiones, siendo obsesión y compulsión un circulo que se retroalimenta.
Para este tipo de trastorno es necesaria la intervención farmacológica como también la psicoterapia individual y familiar.
El trastorno obsesivo es una tendencia estable y abordable, la mayoría de las personas pueden aprender a dejar de llevar a cabo las compulsiones y a disminuir la ansiedad a través de la terapia cognitiva conductual siendo esta una clase de terapia que enseña a las personas a cambiar el pensamiento y comportamientos ansiosos y ritualistas.
By: L. Nayiber Otavo R / Psicóloga
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